Construyó una montaña en el último piso de edificio por amor a la naturaleza

En Beijing, la nostalgia de un paisaje fuera de la urbe puede llegar a ridículos como este, donde un acaudalado hombre de negocios cayó en esta ilegalidad, consiguiendo que todo se derrumbara por orden municipal.

Estuvo más de seis años, a pesar de las quejas de sus vecinos, construyendo en la planta 26, en el último piso de un edificio en Beijing, una montaña con árboles de verdad, caídas de agua y rocas. Corresponden a 1000 cuadrados construidos ilegalmente por Zhang Biqing, un médico de la medicina china tradicional y antiguo miembro de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo del distrito que es dueño de una cadena nacional de clínicas de acupuntura.
La crítica más fuerte es a la impunidad que existe en China, como en muchas otras partes del mundo, frente al poder del dinero. Es así como tardaron mucho tiempo en que el municipio determinara la demolición de este paraíso artificial a la medida.
Pero más allá de esto me gustaría instalar el tema de la necesidad del ser humano por el paisaje natural, el cual constantemente estamos replicando de manera artificial en un ridículo afán urbanístico por volver a lo que este mismo imperativo de cubrir todo con cemento, nos ha arrebatado.