La nueva arquitectura que surgió con la Revolución
Con el régimen de Porfirio Díaz también
sucumbió la arquitectura afrancesada, para dar paso a obras como el
Frontón México y el Teatro de la Ciudad.
FOTOGRAFÍA Tomado de Flcikr/ Karen Cantu
Para la década de 1920 a 1930, tras el armisticio y los
primeros gobiernos cuatrienales, ya no regresaron el neoclásico
porfiriano, ni los exuberantes rasgos afrancesados o italianizados, que
fueron desterrados junto con el dictador, aunque surgieron algunos
resabios intermitentes en algunos diseños.
En esta nueva década tuvo lugar la Exposición Internacional
de Artes Decorativas e Industriales Modernas de 1925, llevada a cabo en
París, y considerada el nacimiento del Art Decó, estilo característico
por sus macizos verticales y geométricos. No sólo influenció a la
arquitectura, sino a la pintura, la moda, los autos, la tipografía, los
muebles y electrodomésticos, y a casi todo lo que el mundo
industrializado producía.
Elegimos cinco edificios públicos representativos de la
Ciudad de México que aún de pie recuerdan lo que podría considerarse el
primer despertar mexicano contemporáneo de la arquitectura.
Departamento de Salubridad e Higiene, 1925Proyecto: Carlos Obregón Santacilia | Motivos escultóricos: Manuel Centurión, Hans Pilling | Vitrales y murales: Diego Rivera
____________________
La Secretaría de Salud federal cumple 87 años en esta misma
ubicación, cuestión que no tiene precedentes en el gobierno nacional
como sede de ministerio. Aunque modificado por las necesidades en su
interior, aún exhibe con la concepción original del arquitecto Carlos
Obregón Santacilia (1896-1961). Emplazado en forma de ‘V’ o compás,
agrupa en sus dos alas las áreas operativas. Sus fachadas de cantera
exhiben una ventanería generosa que conserva todavía la herrería
original.
El gris pétreo y el negro del hierro, también presente en
sus portones, se imponen pero sin peso visual que agobie, dándole
jerarquía, presencia y solemnidad. Su acceso en pan coupé u ochavado
está hacia la calle de Lieja, mirando ahora hacia la Torre Mayor. En
este frontis y en sus dos largos brazos, diferentes motivos científicos y
biológicos, y la representación del hombre y la mujer, adornan los
altos muros y se complementan con los vanos de las ventanas y accesos.
Es la integración de la escultura de rasgos neoindigenistas
o nacionalistas lo que le da textura y sentido al inmueble, sin
necesidad de agregarle un letrero o marquesina de identidad como se
acostumbra actualmente. Hacia el poniente, frente al paradero de
Chapultepec, un singular puente recubierto con lámina de cobre conecta
secciones del edificio por sobre los pasos vehiculares.
"El día 19 de marzo de 1991 la Comisión Nacional de Zonas y Monumentos
Artísticos emitió opinión favorable para declarar al edificio que ocupa
la Secretaría de Salud como un monumento artístico", cita la página
spps.gob.mx.
Tomado de Flickr/ Ferafa
Teatro Coronel Lindbergh, 1927Proyecto:
Leonardo Noriega, Víctor Suárez, Javier Stávoli, Roberto Montenegro
(figuras en relieve), José María Fernández Urbina (Fuente de los
cántaros)
____________________
El fraccionamiento Hipódromo Condesa, diseñado por el
arquitecto José Luis Cuevas Pietrasanta, constaba de dos parques y tres
glorietas unidas por camellones. La ciudad-jardín planificada bajo los
estándares ingleses prometía volverse un sitio ideal para vivir. A
principios de la década de 1920, el parque central, que no tenía un
nombre, ya contaba con el trazo perimetral; en su interior se plantearía
un teatro al aire libre, un lago artificial, fuentes, andadores y
bancas. Cuando comenzó a tomar forma, Leonardo Noriega y Javier Stávoli
se decidieron por la monumentalidad.
El Art Decó también los orillaría a una propuesta expresiva
con altos elementos de concreto armado. El proyecto, ubicado en una
zona con fondo lacustre, conserva sus torres desde hace 86 años, pese a
varios sismos y su esbeltez, pero en contraste han sido dañadas por el
graffiti y la falta de mantenimiento. Dos semicírculos apergolados
convergen y encierran la explanada de amplias proporciones. Sobre el
estrado, una columnata coronada por pérgolas voladas se alza. Al otro
extremo, la 'Fuente de los cántaros' es el portal principal para
ingresar al teatro.
El parque, aunque conocido popularmente como 'México' por
la avenida que lo circunda, en realidad se llama 'General San Martín',
por el libertador sudamericano. Un réplica de la espada del héroe le fue
entregada en 1927 al entonces presidente de México Plutarco Elías
Calles, por ello, se decretó llamar así al recién concluido pulmón
verde. Algo similar ocurrió con el escenario descrito. Ese año, Calles
recibió en la Ciudad de México al legendario aviador estadunidense
Charles Lindbergh, y tanto él como Álvaro Obregón incluso volaron breves
minutos con el joven piloto. De este encuentro se decide el bautizo al
novedoso espacio como 'Teatro Coronel Lindbergh', nombre que hasta hoy
lleva inscrito.
Cortesía:Alain Prieto Soldevilla
Inspección de Policía y Bomberos del DF, 1928Proyecto: Vicente Mendiola
____________________
El hoy Museo de Arte
Popular (MAP), inició su existencia como uno de los más atrevidos
diseños Decó de finales de los 20, en la esquina norponiente de
Revillagigedo e Independencia, frente al actual Teatro Metropolitan, en
el Centro Histórico
capitalino. Su volumetría robusta es a la vez suavizada por la
armoniosa relación de sus elementos. En especial, su minarete o
torrecilla en esquina resulta de gran atractivo desde su arranque con
motivos prehispánicos en piedra (una representación doble de Tláloc,
dios del agua y la lluvia), su escalera con oquedades y su remate final,
que se ha convertido en el emblema de su actual inquilino.
Una descripción de la estructura puede encontrarse en el libro Historia
de la arquitectura mexicana de Enrique X. de Anda: "es uno de los
ejemplos más notables del periodo, dueño de una calidad excepcional de
diseño de fachada en la que se integran los más importantes recursos
estéticos propios del estilo".
Por dentro, el patio central es techado por un ligero domo
traslúcido añadido en la adecuación que lo transformó en recinto
cultural en 2007, a cargo de Teodoro González de León.
Esta exestación de Policía y Bomberos, que aún conserva los
tres arcos por donde los carros de bombas acudían a los siniestros,
aparece brevemente en la película 'El bombero atómico', protagonizada
por Cantinflas, en 1950. Su artífice, el arquitecto Vicente Mendiola, es
más conocido por sus diseños de la Fuente de Petróleos y de la Diana
Cazadora.
Tomado de Flickr / A30_Tsitika
Frontón México, 1929Proyecto: Joaquín Capilla____________________
Homónimo del clavadista y multimedallista olímpico mexicano (quien por cierto estudió arquitectura y abandonó la carrera), el arquitecto Capilla crearía un cuerpo para el Jai alai (fiesta alegre, en lengua euskera o vascuence). El edificio, largo y de mediana altura es uno de los primeros escenarios techados para eventos deportivos del siglo XX en el país. Sus características ventanas alargadas y su color amarillo contrasta en volumen, proporción y colorido con el Monumento a la Revolución, que no existía cuando el recinto deportivo abrió. También basado en el Decó, con macizos prominentes y pocos vanos, exhibe motivos indigenistas en cantera.
A principio de los años 90 del siglo pasado revivió y
convocó a los mejores pelotaris del deporte vasco. Azules y rojos cada
noche disputaban sus encuentros ante la concurrencia. Un espectáculo que
nunca fue masivo y que corresponde a gustos más añejos, fue llevado
incluso a un público más extenso a través de la televisión por cable.
Parecía entonces que no dejaría de escucharse el eco del golpe de la
pelota y que las cestas permanecerían más tiempo, pero muy poco después,
en 1996, el Frontón cerró indefinidamente por conflictos laborales que
derivaron en una huelga y un deterioro en su interior.
Tras diversos intentos de rescate que ya han abarcado 17
años y la intervención del gobierno capitalino, se ha dejado entrever
desde abril que a fines de este 2013 se reabrirá y podrá incluir un
hotel boutique entre otras adiciones.
Tomado de Flickr / A30_Tsitika
La Nacional, 1930
Proyecto: Manuel Ortiz Monasterio, Bernardo Calderón y Luis Alvarado
Proyecto: Manuel Ortiz Monasterio, Bernardo Calderón y Luis Alvarado
____________________
Esta aseguradora se vincula a los edificios más altos del
primer tercio del siglo XX en México. El proyecto alojó las nuevas
oficinas de La Nacional, Compañía de Seguros sobre la Vida, S.A. (más
tarde La Provincial), que había sido fundada en noviembre de 1901 "por
los socios de la Casa Woodrow, señores William B. Woodrow y Luis E.
Neergaard", detalla gnpseguros.blogspot.mx.
Adelantados una vez más, sólo ocho años después deciden
proyectar una espectacular sede en una ubicación histórica: San Juan de
Letrán (hoy Eje Central) y Av. Juárez, donde alguna vez estuvo la
Fotografía Daguerre, uno de los primeros estudios fotográficos del país.
La 'primera piedra' del altísimo inmueble de concreto armado fue
colocada en 1930. El Art Decó, en parte tipo neoyorquino —como se le ha
calificado— 'dictó' la fisonomía de la vertical obra, donde se iniciaban
los análisis de comportamiento sísmico y las cimentaciones profundas a
base de pilotes. Inaugurado en 1932, es considerado el primer
'rascacielos' mexicano con poco más de 50 metros de altura.
Publicar un comentario Blogger Facebook